El Gobierno nacional oficializó un nuevo aumento del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) para los próximos meses, y ya se conoce el monto correspondiente a junio de 2025. A través de la Resolución 25/2025, publicada el viernes 9 de mayo en el Boletín Oficial, se estableció un esquema de incrementos escalonados que define los valores mensuales desde abril hasta agosto.
¿Cuánto es el salario mínimo en junio 2025?
De acuerdo con lo dispuesto por el Ministerio de Capital Humano, el salario mínimo en junio 2025 es de $313.400 mensuales para los trabajadores mensualizados que cumplen la jornada legal completa.
En el caso de los trabajadores jornalizados, el valor diario pasa a ser de $1.567.
Cómo queda el salario mínimo mes por mes
Estos son los valores fijados por el Gobierno nacional:
- Abril 2025: $302.600
- Mayo 2025: $308.200
- Junio 2025: $313.400
- Julio 2025: $317.800
- Agosto 2025: $322.200
El incremento se decidió de forma unilateral, luego de que fracasara el intento de acuerdo entre el Estado, las cámaras empresarias y los gremios, en la reunión del Consejo del Salario celebrada el 29 de abril.
¿Cuánto perdió el salario mínimo frente a la inflación?
Según estimaciones basadas en el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, el SMVM acumula a mayo 2025 una caída del 31,3% en términos reales respecto a noviembre de 2023, último mes antes del inicio del gobierno de Javier Milei.
Además, comparado con mayo de 2024, el salario mínimo cayó un 8,5% real.
¿Qué es el Salario Mínimo, Vital y Móvil?
El SMVM es el piso de ingresos que puede recibir un trabajador registrado en Argentina. Está garantizado por el artículo 14 bis de la Constitución nacional y fue reglamentado por la Ley de Contrato de Trabajo. No puede ser embargado, excepto por deudas alimentarias.
Además, el salario mínimo tiene un impacto directo en:
- Programas sociales como el Potenciar Trabajo.
- El cálculo de cuotas alimentarias.
- Algunos planes de asistencia o becas.
También sirve como referencia para negociaciones salariales, aunque no todos los convenios colectivos lo toman como base directa.
